domingo, 19 de abril de 2009

Y sin ni siqiera intentarlo, llegaste a mi corazón y te qedaste hechando raíces en él, para qe crezca la flor del amor, la rosa más única. Tendrá sus momentos de dolor, sus espinas punzantes, como toda rosa, pero es tan hermosa qe vale la pena sufrir a veces con ellas solo para disfrutar de su belleza, de su aroma, de su presencia irremplazable... Porqe como en El Principito, aunqe haya millones de millones de rosas, ninguna va a reemplazar a ESA rosa, la qe vos plantaste y en mí creció. La qe ahora necesita de tu cuidado, la qe se esta desesperando sin qe la riegues... Porqe esa rosa es mi amor hacia vos, qe por mas qe le falte tu agua para vivir y luz para conseguir energia, la luz de mi sol, tu luz, JAMÁS se va a marchitar. Es capaz de esperar eternidades a qe llegues a cuidarla, pero sabe qe algun dia llegaras: como siempre estas presente en mi mente y en mi corazon, en cualqier momento estaras presente en mi vida, y de la planta de la rosa brotarán pimpollos de felicidad, listos para abrirse y qedar abiertos en otras perfectas rosas PARA SIEMPRE, viviendo de la luz y el agua qe les trajo ese momento, ese simple encuentro con la razón de su existir. Con vos Joseph. De vos estoy enamorada y de vos lo estare por siempre. Te vea o no te vea. Pero sé qe te voy a ver, te debo ver. Porqe nada más necesito y nada más qiero. Encontrar la razón de tanto amor, para qe florezca la felicidad y dure por siempre viva en la memoria

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